Recetas urbanas para frenar el precio de la vivienda
En este blog se ha hablado varias veces de diferentes tipologías constructivas que se han ido creando según las necesidades de sus moradores; así hablamos, o discutíamos, sobre las nuevas casas cuevas creadas en la Comunidad Valenciana.
Hoy traemos otra propuesta que no por ser una interesante solución constructiva, deja de ser muy polémica: hablamos de las Casas-Azoteas .
Este conocido modelo pasa por convertir las azoteas de nuestras fincas de viviendas en nuevos lugares donde poder instalar pequeñas viviendas (entre 25 y 30 metros cuadrados) que serán alquiladas por la comunidad al los inquilinos por módicos precios que repercutirán en la comunidad.
Los inconvenientes de la idea del arquitecto Santiago Cirugeda son, en su mayor medida, de carácter jurídico (cumplimiento de las ordenanzas municipales, necesidad de reordenar la propiedad horizontal del edificio, conseguir cédula de habitabilidad…) ya que los condicionante técnicos pueden ser cumplidos (calculo de la incidencia del nuevo peso en la estructura y desvío de servicios a la azotea)
En mi opinión, la posición que adopta el arquitecto a la hora de vender el proyecto como algo clandestino, secreto y, porque no decirlo, ilegal en la mayoría de los casos es la mejor baza porqué impulsará a aquellos que deseen tener una vivienda por 24.000 euros a negociar con la comunidad sin el beneplácito municipal.
Además, estas viviendas abren el campo a la tendencia que ha hecho famoso IKEA de «hágaselo usted mismo» ya que el proyecto se vende como una construcción que se puede realizar en un fin de semana con un grupo de amigos.
Otra forma de crear ciudad, o compactarla mas si cabe, que viene impuesta por el modelo inmobiliario español y que su tendencia natural es su expansión mientras el acceso a la vivienda no sea mas fácil.
Os dejamos las «instrucciones de montaje» y el vídeo para su construcción.
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2 Responses to Recetas urbanas para frenar el precio de la vivienda
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Habrá que ver si salen adelante o no, a mí la idea no me parece mala pero hay que contemplar varias cosas (además de las que tu has tenido en cuenta) como si al estructura aguantará tormentas y fuertes vientos, por ejemplo, se me ocurre ahora mismo.
Además, si el edificio no tiene ascensor, habrá que compensar a los amigos que te ayuden con un megafiestón en la azotea, no? jajaja
Lo bueno de esto es que en verano tienes una buena terraza y eso a día de hoy es un lujazo, sobre todo en las grandes ciudades…
Muy buena idea. Pero, una vez más, el problema son las normativas.
Las normas legales se han convertido en el gran obstáculo para construir, y para lograr una vivienda digna.
Deberíamos denunciar en los tribunales a los ayuntamientos, o ministerios, cuyas normas impiden el progreso técnico, o la mejora de las viviendas y el urbanismo.
Se supone que las normas están para mejorar la calidad de las viviendas, del urbanismo, etc, pero hoy en día son un auténtico obstáculo insalvable para mejorar nada, sólo sirven para perjudicar a todos los intervinientes, y para encarecer el producto final.