El derribo de la primera colonia textil en Esparreguera
La antigua fábrica textil de Antoni Sedó, construida en 1846 en Esparreguera (Baix Llobregat) y alimentada por energía hidráulica, está siendo derribada estos días. La colonia Sedó fue la primera y la más importante fábrica textil de Cataluña. Hoy, las viviendas son precarias y los talleres obsoletos, el municipio quiere recuperar la zona para que sea reconocida como Patrimonio de la Humanidad.
La central hidráulica que la abastecía dejó de funcionar hace más de 28 años, el antiguo jefe se marchó en 1980 permitiendo a los habitantes seguir viviendo en sus pisos, pero en condiciones precarias, sin abastecimiento normal de luz y de gas.
La Generalitat y el Ayuntamiento de Esparreguera (en el Baix Llobregat) se comprometieron en 2003 a renovar el espacio donde se encuentran las antiguas viviendas y la fábrica y ampliarlo. Para ello, el conseller de Política territorial y Obras públicas de Cataluña Felip Puig y el alcalde de Esparreguera Xavier Sitjà, firmaron hace unos días un convenio a través del cual Incasòl pasa a ser propietario del suelo de este terreno industrial del siglo XIX.
El presidente de la Asociación de vecinos de la colonia Sedó, Juan Flores, declaraba ayer: “estamos muy satisfechos. Ver las máquinas por el pueblo nos hace mucha ilusión, vivíamos en unas condiciones muy malas”.
La fábrica cerró en 1980 por culpa de la crisis textil y desde entonces, los 120 habitantes de las viviendas del barrio no pagan alquiler pero se han puesto de acuerdo en pagar una cuota para luz y gas. Con el proyecto de derribo y posterior renovación de la zona, se pretende devolver la colonia al municipio de Esparreguera y volver así a la “normalidad”.
Incasòl prevé la construcción de 229 pisos nuevos, respetando el estilo arquitectónico de la colonia y de entre los cuales, 150 viviendas serán de protección oficial, 38 pisos se destinarán a los habitantes que viven ya allí y que son realojados. Los 191 pisos restantes serán destinados a los nuevos vecinos.
El proyecto presupuestado en 10 millones de euros desde un inicio, durará unos seis años pero los primeros cambios serán apreciables dentro de dos años. Se quiere rehabilitar la zona mezclando historia, naturaleza y viviendas. La iglesia se convertirá en un espacio de actividades culturales de la comunidad. La rehabilitación pretende recuperar asimismo el Jardín del Amo, creando una apertura hacia el río Llobregat.
La idea es que el espacio sea declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, recuperando el espacio histórico e integrándolo en la vida de los habitantes, y no lo contrario. Se trata de resaltar el origen de esta colonia histórica y de crear un espacio funcional para sus habitantes, orgullosos de su patrimonio y de la historia de su barrio. En boca del alcalde: “estamos orgullosos de nuestro pasado y así recuperaremos uno de los emblemas de nuestro municipio, pero también de Cataluña”.
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3 Responses to El derribo de la primera colonia textil en Esparreguera
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a los vecinos no les importava seguir viviendo en esas casas xk seguro k las k van a hacer nuevas no duraran nada.
Cuantos habitantes celebraron el despido «Cierro» de la colonia de sedo?